Fotografía: http://samuraichopstick.deviantart.com/ |
Se creó entonces una situación de tensión.
La noche enmudeció de repente.
Sin saber por qué, ella musitó un tímido: Sí.
Le sorprendió no haber dudado ni un segundo,
a pesar de sentirse descolocada,
sin ser capaz de adivinar qué estaría pasando por su mente.
Acababa de afirmar algo que ni ella misma podía creer,
algo que ambos tardarían en asimilar.
¿Era posible que algo estuviera cambiando?
¿Se había equivocado? Quizás sí.
Quizás su error fue pensar que sería capaz de dejarse llevar
y no llegar a sentir nada por él.
Pero es bien sabido que nadie manda en los sentimientos,
ni uno mismo puede controlarlos.
Escrito por Chandra © 2010
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